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viernes, 15 de marzo de 2013

PATIO DE VECINOS


- Pues no decías que eran dos. –D. PACO-
- La otra vendrá después. –MARTA-
- Yo opino que el Madu este puede ser un buen chico y en ser su amigo no hay nada malo, pero tienes que andar con mucho ojo, tu Marta, eres guapa, simpática y agradable a rabiar, tienes carrera, trabajo fijo, vamos que para muchos eres una perita en dulce, y no digamos para Madu. Ándate con ojo y no profundices tanto, sé que eres muy buena chica, con grandes sentimientos, pero de las buenas chicas se aprovecha todo el que puede, desde luego si se pasa contigo se las tendrá que ver conmigo, sabes, bromas aparte, que te quiero mucho, como a una hermana..-FERNANDO-
- Gracias Fernando, no esperaba menos de ti, Vd. Señora Carmen que opina.
- Pues yo soy muy drástica, no soy racista y en mi mundo caben todos, pero cada oveja con su pareja, tienes a Javi, mi hijo, ingeniero industrial, eso sí en paro que es mejor partido y quererte se yo que te quiere un  montón. Ni que decir tiene que estoy de broma, eres una chica muy inteligente, siempre te has rodeado de buena gente y no me cabe ninguna duda que Madu, si es tu amigo, es un buen chico. –CARMEN-
- Y Vd. Dolores que está muy callada. –MARTA-
- A mí ni me llames de Vd. que me haces más vieja, además si siempre me has llamado de tu, a ver si ahora porque seas toda una señorita lista y educada van a cambiar las cosas entre nosotras, como me vuelvas a llamar de Vd. te doy un sopapo. Yo opino, ya sabéis que no entiendo de nada, que lo mejor hubiera sido que Madu estuviese aquí tomando un café con todos nosotros y así le conocíamos y decíamos que ojito con hacerte daño, que hay mucha gente que te quiere y mucho. –DOLORES-
- Que buena eres, da gusto hablar con Vd. -MARTA-          
- Que te doy el sopapo, no me llames de Vd.
- Y tu Manuela, qué opinas.
- Yo no tengo opinión, solo sufrimiento, no estoy lúcida para dar opiniones a nadie, mi hija se casó con un buen chico y nuestras bendiciones, de mi marido y mías y mira como se ven a punto del desahucio, sin trabajo, con dos criaturas y con nuestro piso de aval, vamos que he venido a tomar café porque me ha mandado ella y no quiero preocuparla más, pero prefiero no opinar sobre nada, pero por favor seguir con el tema que por lo menos me distrae y cuando vuelva a casa tendré algo que contar para no estar pendiente las 24 h. de lo que nos pasa.
- ¿Está Isa en su casa?, pues dígale que mañana por la tarde me paso y vamos a dar un paseo con los niños, hace un montón de tiempo que no la veo y tenemos muchas cosas que contarnos. –MARTA-
- Yo se lo diré hija, gracias. –MANUELA-
- Yo, como soy tu madre, mejor no doy mi opinión ya sabe todo el que lo quiera saber que he intentado educarte lo mejor posible, diciéndote siempre lo que era bueno o malo y ahora que eres mayor de edad eres tú la que tiene que defenderse en la vida. –ANGELA-
- Bien, pues ahora va la segunda historia. Madu es hijo de un embajador en España de su país, tiene la carrera de periodismo, la hizo en Estados Unidos y aprovechando que su familia está en España ha venido para hacer un master. Nos conocimos en la universidad y justo cuando aprobé la oposición y empecé a trabajar es cuando empezamos a vernos solos, pero eso sí solo como buenos amigos. Su madre es encantadora, habla español al igual que su padre, los conozco porque he comido un par de veces en la embajada invitada por ellos y sí, todos ellos me han invitado este verano a visitar su país y es casi seguro que iré, la verdad es que me hace ilusión. A Madu le han salidos dos ofertas de trabajo una aquí en España y otra en Estados Unidos, donde su padre tiene muy buenas relaciones y  por supuesto le han ofrecido mejores condiciones económicas que aquí, pero dice que le da miedo perder mi amistad y está dispuesto a quedarse unos años aquí en España, a su padre no le hace demasiada gracia porque dice que las oportunidades pasan una vez en la vida, pero su madre dice que haga lo que él crea conveniente, que es su vida. Se me olvidaba, Madu es hijo único.
- Joder con Madu, poco más y es el hijo del rey de su tribu. –ALFONSO-
- ¡Mira que eres bruto! –ANGELA-
- Entonces tiene posibles. –DOLORES-
- Yo no he dicho cuál de las dos historias es la verdadera, pero ya veo que os gusta más la segunda que la primera. –MARTA-
- ¡Mujer! de que llegue a España en patera como Kunta Kinter o sea periodista y su familia diplomática, me quedo con la segunda eso sin pensarlo. –RAMÓN-
- Y tu Manuela qué opinas. –MARTA-
- Ya he dicho que no estoy para dar muchas opiniones, pero la verdad prefiero que sea la segunda historia y si encima fuera rico y tuviera petróleo en su país, pues mejor que mejor. –MANUELA-
- Aquí es donde yo quería llegar, si es un pobretón somos xenófobos y no le queremos, pero si es pudiente ya la cosa cambia y le aceptamos. Pues sea como sea, os recuerdo que sigue siendo negro. –MARTA-
- Sí, pero ahora un poquito menos. -Ríe D. PACO-
- ¡D. Paco! esto sí que no lo esperaba de Vd. precisamente. –ANGELA-
- Es que se dónde quiere ir a parar Marta y estoy completamente de acuerdo con ella, por eso he dejado caer esa tontería, pero estaréis de acuerdo que aunque fuera blanco si el que sale con nuestra Martita es un matao no nos parecerá bien, pero si tiene sus estudios y más o menos buena posición nos parecerá de perlas, a que sí. –D. PACO-
- Claro que sí, tiene Vd. razón. –DOLORES-
- Pero Dolores, creía que tú te inclinabas más por el amor que por la condición. –MARTA-           
- Mira hija, te voy a decir una cosa, sabes cómo todo el mundo que yo estuve de emigrante en Suiza con mi marido y allí éramos menos que nadie y eso hay que sufrirlo, porque en tu propia patria lo sufres, pero es muy diferente, en cambio he conocido españoles ricos que vivían en Suiza y los consideraban como al que más, así que, no es el caso ni mucho menos, porque si el chico no te gusta sea pobre o rico no te vas a casar con él, creo que te conozco bien, pero como dice Ramón cásate con Kunta Kinter y verás lo que es bueno o cásate con el hijo de un embajador y también verás lo que es bueno. Vamos que ya sabéis mi opinión, que yo no entiendo de nada, pero los emigrantes que no quiere nadie son los que no tienen ni un duro, pero los emigrantes ricos los quieren en todas partes y aunque no entiendo de nada ahora sí que se de lo que hablo.
- Pero sácanos de dudas, que estamos en un sin vivir, es pobre o es rico. –FERNANDO-
- Eso lo tendréis que descubrir vosotros. –MARTA-

jueves, 7 de marzo de 2013

PATIO DE VECINOS


- ¡Hombre D. Paco, usted por aquí! cuanto bueno –DOLORES-
-Sí, he venido a tomar un poco el sol y el aire, hasta las cuatro que es la partida he decidido darme un paseo.
- Eso está muy bien, que mucho aconsejarlo a todo el mundo y usted precisamente que es el médico nunca le vemos en el parque.
- Y cómo es que anda tan sola.
- Hemos quedado aquí porque es el cumpleaños de Martita, la hija de Ángela y nos va a invitar a un café, la niña no, la madre.
- ¿La niña? Se refiere a la única hija de Ángela, ya tiene por lo menos 23 años o más.
- Sí, hoy cumple 24, pero para nosotras siempre será la niña.
- ¡Ah, muy bien! Ya decía yo. Pues sabe una cosa,  me voy a quedar para que también me invite a mí, tengo ganas de saber de qué hablan ustedes todos los días, que las veo al pasar tan entretenidas con la conversación.
- ¡Pues muy bien! La que paga es Ángela, así que se lo dice a ella, ja, ja. Miré allí vienen.
- Buenas tardes, saludan todas.
- En que buena compañía te vemos –CARMEN-    
- Sí, aquí estoy de palique con D. Paco, por cierto Ángela se viene a tomar café. –DOLORES-   
- Pues muy bien, a sí somos más, pero que no nos diga si podemos tomarlo  o no por eso de la tensión que no le vamos hacer caso, además he encargado a Julia una tarta, un día es un día. –ANGELA-
- No, no, en eso no me meto, hoy soy uno más, mañana la que vaya a consulta se lleva la bronca –D. PACO-
- ¿Nos vamos ya?
- Falta Manuela –DOLORES-          
- Me ha dicho que luego va derecha al bar, que como ahora tiene a su hija y familia en casa anda más liada y llegará un poco más tarde –CARMEN - 
            Llegan al Bar, allí están como siempre echando la partida,  se sorprenden al ver a D. Paco con las señoras y al enterarse se unen al grupo para tomar café todos juntos.
- ¿Cuantos años cumple tu niña? – RAMÓN-
- Veinticuatro –ANGELA-
- ¡Pues hay que ver cómo está la niña, así me las receta a mi D. Paco! –FERNANDO-
- Cuidadito, que yo ese tipo de recetas no las hago, dejemos las cosas claras –Ríen todos-
- Y sin novio, yo a esa edad me case –DOLORES-
- Eran otros tiempos, ahora Marta es muy joven hasta para tener novio. –ANGELA-
- Eso lo dices tú que eres su madre, no faltará quien le ronde –MANUELA-
- Yo la vi el otro día con un negro, creo que iban a tu casa –DOLORES- 
- Sí, es un buen amigo de Marta, desde que llegó a España son amigos –ANGELA-
- Pues que tenga cuidado que no son de fiar –MANUELA-
- Es su vida, yo en eso no me meto, ni mi marido tampoco. –ANGELA-

- ¡Mamá! Ya estoy aquí, venía corriendo para llegar a tiempo de que me cantarais el cumpleaños feliz y tomar un poco de tarta –MARTA-
- Has comido ya, si no que te prepare Julia algo, aunque sea un sanwis. –ANGELA-
- Sí, he tenido la suerte de comer con Madu, es un encanto.
- ¿Quién es ese, el negro del que estábamos hablando? –MANUELA-     
- Supongo que sí, porque solo tengo ese amigo negro, los demás son solo conocidos. MARTA-       
- O sea que hay algo –CARMEN-    
- No, no, no saquemos las cosas de quicio, es un buen amigo, pero como dirían ustedes ni siquiera con derecho a roce. –MARTA-
- Ya, ya, por eso te vi darle un beso cuando te despedías de él. –CARMEN.
- ¿Cómo se despide Vd. de los amigos? –MARTA-
- Pues ahora cuando nos vayamos lo verás, los digo hasta luego y ya está. –CARMEN.
- Ya, lo que pasa es que usted, con todos los respetos, me saca veinte años como mínimo y las costumbres cambian. Cuando he entrado, con el achaque del cumpleaños, me ha besado todo el que estaba en el bar, usted cuando cumple años cuantos la besan. –MARTA-     
- A mi pocos, los más allegados y sobra. –CARMEN-       
- Pues ya tiene usted la respuesta. –MARTA-
- Bueno, vamos al grano, te vas a casar con él o no. –FERNANDO-
- Pues mira de momento no y digo de momento porque nunca se puede decir de esta agua no beberé, pero sí que es muy posible que este verano me vaya de vacaciones a su país, a conocer gente nueva, costumbres, etc.
- ¡Ah! pues parece que no, pero me quedo mucho más tranquilo, ya sabes desde que naciste no me he echado nunca novia porque te estoy esperando para casarme contigo –RIE FERNANDO-
- No te preocupes, que algún día nos casaremos, dice MARTA, mientras se arroja en sus brazos y le da un gran beso fraternal.
- Lo ves, a Fernando le puede besar y abrazar y al pobre Madu no, eso porqué, a ver que me lo explique alguien –ANGELA-
- Solo faltaría que todos fuéramos iguales – dice Fernando entre bromas y risas-
- Tu ten cuidado que los emigrantes saben mucho y desde luego eso de irse con él a su país de vacaciones es una locura en toda regla, vamos que yo no te dejaría si fuera tu madre y sabes que en el barrio nos conocemos todos y te queremos desde que naciste, que un mal consejo no te le vamos a dar en la vida. MANUELA-
- Ya lo sé, señora Manuela, pero ahora que estamos juntos, les voy a contar dos historias, ya les advierto que son dos, para después sacar conclusiones. –MARTA.
Madu, ha llegado a España en patera, no tiene estudios, apenas sabe leer, ni escribir, pero eso sí, es  muy espabilado y trabaja aquí y haya y nunca le falta un pedazo de pan que llevarse a la boca, yo le conocí en la universidad haciendo pequeños trabajos a unos y otros, hicimos amistad, de la buena de la que no hay nada por medio y me encanta su compañía, su conversación y sí le he traído a mi casa a comer más de dos veces y ya he advertido a mis padres que si sigue aquí para Navidad, cenará con nosotros, no le voy a dejar solo en la calle. Él no entiende muy bien lo de la Navidad, entre otras cosas porque es musulmán, pero yo si lo entiendo y la pasará con nosotros.
Esta es su historia más o menos, ahora conclusiones.

CONTINUARA...

sábado, 2 de marzo de 2013

PATIO DE VECINOS


- Vistes el otro día la gala de los Goya, en la tele. –DOLORES
- Sí, te gustó, te acostarías tarde –ANGELA-
- Ya lo creo, a la una y media me acosté, pero estuvo muy bonito, me lo dijo Carmen que lo viera que me iba a gustar. –DOLORES-
- Y que es lo que más te gustó –ANGELA-
- Aparte de los vestidos, iban todas guapísimas, me gustó mucho todo lo que dijeron criticando al gobierno, anda que el ministro ese que estaba en el público no lo tuvo que pasar mal ni nada. –DOLORES-
- Están acostumbrados a todo –ANGELA-
- Lo que he oído en la radio, como la pongo por las mañanas mientras hago las cosas, es que no les gusta a la gente que se hayan metido tanto con el gobierno y hayan sido tan críticos y que lo que dijo esa de blanco que su padre se había muerto sin mantas para taparse y sin agua para beber que es mentira, han salido del hospital donde pasó diciendo que eso es mentira que hay mantas y que también hay todo el agua que quieran, pero digo yo, ya sabes que yo no entiendo mucho, porqué iba a decir eso si fuera mentira. –DOLORES-
- Pues para que veas que todos son unos mentirosos, claro que es verdad como iba a decir ella de su padre una cosa así si hubiera muerto como Dios manda y también dirán que es mentira que lleva la pobre tres años sin trabajo. Yo también he oído que han puesto verde a Maribel Verdú por decir lo que dijo de los desahucios, que si ella ha hecho publicidad de bancos y de inmobiliarias y ahora se queja, pero es lo que yo digo que tiene que ver una cosa con otra. –ANGELA-
- Y tú que crees, vamos mejor dicho que piensas. –DOLORES-
- Pues yo pienso que también me gustó ver que además de artistas son humanos y se dan cuenta de lo que pasa en España, porque siempre creemos que los que tienen mucho no piensan en los demás, entonces me ha gustado que demuestren que están al cabo la calle, peor son los futbolistas que todavía no se ha oído a ninguno decir nada al respecto. – ANGELA-
- Es verdad. Por cierto y cambiando de tema te has enterado que Fernando, el que me hizo el baño, va por las casas haciendo lo que le manden, limpiar terrazas, vamos los cristales, quitar cortinas, cualquier pequeña cosa que la gente no pueda, el pobre lo hace porque no tiene ni para comer. Yo le he dicho que se pase cuando pueda a quitarme las cortinas para lavarlas y cuando se sequen que me las vuelva a poner, porque la verdad es que como no puedo subir a una escalera llevo desde que se murió mi marido sin lavarlas. –DOLORES-
- No me digas, pues me parece muy bien, quizás le avise para limpiarme todas las ventanas que con las contraventanas no me atrevo ni yo, ni mi marido a quitarlas no se nos vayan a caer a la calle y matemos a alguien que ya no podemos con ellas. –ANGELA-
- Es muy buen chico, a mí me dijo cuando estuvo en casa que si necesito ir al médico que le avise y me lleva él con el coche.  No creas que soy tonta que sé  que me cobró muy poco por la obra, a otros ha cobrado más. -DOLORES-
- Él es así, muy buen chaval –ANGELA-

- Mira ya va D. Paco a la partida. –ANGELA-
- Si, otro igual que buena persona es, aunque es médico nunca le importó jugar con mi marido, no mira lo que es uno ni otro, como él dice soy el médico en consulta, en la calle soy uno más- - DOLORES-
- El otro día dice mi marido que, con lo serio que es, les gastó una broma, les dijo “hoy ha ido una señora a mi consulta que se encontraba fatal, gorda, desmejorada, con los pies hinchados, la cara blanca como la pared y que qué creía yo que tenía, ya la dije mucha razón señora, mucha razón”. Todos se quedaron helados mirándole hasta que se echó a reír, entonces todos se dieron cuenta que era una broma. –ANGELA-
- Sí, a veces te dice cosas que no sabes cómo tomártelas, yo voy todos los meses a tomarme la tensión y una vez me dijo “pues no quería usted morirse, para que viene tanto”, me dejó boquiabierta y dijo que era broma que fuera siempre que quisiera, ya le dije, eso fue cuando me quede sola que estaba muy deprimida, pero de todas formas no crea usted que me importaría mucho morirme, lo que me da miedo es ponerme  mala y a ver quién me atiende. –DOLORES-
- Pero eso nos da miedo a todos, no a ti sola eso es mejor no pensarlo, lo que sea será. –ANGELA-
- Llevo varios días sin ver a Manuela, sabes dónde anda. –DOLORES-
- A ella no la he visto, pero si a su marido, creo que está con su hija Isabel, que mal lo están pasando todos con lo del desahucio, pobre gente, nunca pensamos que nos va a tocar a nosotros y mira ya nos va tocando. –ANGELA-
- Es verdad, menos mal que Javier, su hijo, sigue  trabajando. – DOLORES-
- Sí, aprobó la oposición, está de enfermero en el hospital, un chico muy majo y responsable.-ANGELA-