Es muy frecuente cuando un escritor acaba una novela y lo comunica a sus allegados que estos le digan “ah, pues pásame un ejemplar para leerla”.
Una vez editada y puesta en librerías, donde van publicitando su obra “lo normal” es dejar un ejemplar para que lo conozcan, siempre con la esperanza de que compraran ejemplares, a veces sí, a veces no. Incluso en lugares oficiales como bibliotecas, Casas de Cultura, colegios, siempre piden un ejemplar para verle y después si interesa hablar.
¿Alguien está dispuesto a regalar su trabajo?
Los artistas, literatos, pintores, escultores, fotógrafos, etc. viven de su trabajo y si son artistas de medio pelo, aún más.
Por favor olvídense del “pásame un ejemplar” y respeten el trabajo de los demás.
Coincido con lo publicado.Nada nos es regalado y cada expresión lleva un esfurzo.Contribuir con quines pasan horas ingeniando,para hacernos pasar un rato ameno, complacer y saciar nuestra curiosidad.Bien merece garantizarlo con ese aportación económica,que se nos demande.Repito nada nos es ni nos debe ser regalado..Salvo esa sonrisa y afecto de quien ponen lo mejor de si mismo para hacernos felices...
ResponderEliminarGracias por tu comentario, tu siempre tan amable.
ResponderEliminarGracias por tu comentario, tu siempre tan amable.
ResponderEliminar